02 diciembre 2007

Después de la lectura.



Detrás de los cristales

rotos.

Detrás del fuego

que destruye.

Detrás de la ceniza

que lo tizna todo

de azul sucio.

¡Tan sucio!

Después del Horror más execrable

inventado por

los hombres…

Tan sólo nos queda…

mirarnos,

a través

de la desnuda inocencia

de los ojos

de los niños.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Simplemente, muchas veces habría que ver el mundo con los ojos de un niño para evitar muchos problemas que los adultos por "tontos" nos buscamos.